jueves, 27 de agosto de 2009

El Colmo

Cambié el rumbo de mi vida

quemé mi ropa, sacudí mi cabellera.


Me quité el maquillaje, baje de peso.

Intento no ser la misma de antes.

Comida preparada, leche fría

sangre tibia, de mis bragas salía.

Eso fue en primera instancia,

las primeras veces dolía.


Encontré un buen empleo, sin propinas ni enredos.

Sin agetreo ni visitas rápidas, con un escritorio

me siento y escucho reclamos todo el día.


Número 34 módulo C, pitillo que revientas mis oídos.


Marco la tarjeta, me voy con fatiga.

Llego a la pieza, nada en el tele.

Cierro los ojos y otra vez suena, para cagarla más

suena, identico al pitillo de la oficina.


Salí sin paraguas, se puso a llover,

se me quebró un taco.

Mi maletita se rajó, mis cosas calleron

a la rejilla del paseo, de donde los niños

tienen miedo a caer.


Me tiré a llorar al suelo, se acercó una señora

con pena me mira, y le devolví la mirada.


"Sabe señora, como puta vivía mejor"


GUILLE.

sábado, 15 de agosto de 2009

Desdoblarse...



Logré cerrar mis ojos, en un suspiro de larga duración.

Siente el viento como yo, comienza a correr, sin destino
sin razón, con libertad cual pluma llega a un libro, cual
hora es de la muerte.

El dolor se esfuma, vuelan gaviotas, el crepúsculo
está en su gloria, ya casi anochece
Desaparecen los gestos, no existe el miedo
mueren las proyecciones, nacen las esperanzas.

Colores de tarde, colores de muerte.

El agua fluye, el viento continúa soplando,
siento que vuelo en mi elevo.

Decidí de una buena vez abrir los ojos.
Aún tengo la herida de bala, la sangre
no se detiene, no se dónde se ocultaba.

Mis enemigos ya vienen por mí, pero
ya no estoy, he sido capaz de transportarme
al lugar de la tranquilidad, donde mi carácter
supremo me elevará a lo celestial.

GUILLE.

Cuando la Música Acabe