Érase una vez un bonito año

Comenzará acazo una vida nueva... al parecer para mi si..

Mi último año de colegio, quizas el último en que podre hacer todas esas cosas que me hacían levantarme por la mañana..

Pero también el comienzo de una nueva etapa.

Comenzaré el año en otro lugar, con planes diferentes, con ideas diferentes. pero el objetivo sigue siendo el mismo.

Espero concretar lo que al parecer está comenzando. Dejar atras lo no concretado, y lo que me indujo a paralizarme para no concretarlo.

Espero mirar el pasado, y reirme de las cosa que hice y de las cosas que me pasaron.

Conocere a más gente nueva, es lo que me gusta hacer. Conocer sus diferentes maneras de persivir la vida, recibir y hacer criticas..

Será un buen año. Serán buenas personas, y yo seguire siendo el mismo el bipolar, el tiernucho, el weon buena gente, el amable, el "casi casi", el amigo, quizas el novio, el hijo, el hermano, el sobrino, el nieto, el vecino, el amante, el baby sister, el Rockero Celeste...

Simple y humildemente yo..




Guillermo....

Descripcion

Desde el décimo piso de un apartamento en Punta Centinela, a unos 140 kilómetros de mi destino original, escribo.

A pesar del calor, solo basta abrir una ventana para que se refresque el lugar, aquella brisa que es abundante a casi 25 metros de altura.

El lugar es agradable, es amplio y acogedor. Invita a volver a visitarlo.
El sector de la piscina aparenta un lugar del Caribe, y vaya que si lo logra. Después de cruzar en tres oportunidades la gigantesca piscina, calme mi fatiga en el jacuzzi, cuyas aguas bordeaban los 37°.

Era el turno de visitar la playa, que se encuentra solo a metros de mi lugar, coincidentemente había un matrimonio en el restaurant a orillas de la playa. El ambiente era agradable, las mujeres abundantes, pero me atrevo a decir que la belleza no. Pero las que realmente a mi criterio eran bellas iluminaban el lugar.

Luego de gozar del agua tibia, y de escribir mensajes en la arena, nada mejor que tomar una piña colada en el bar de la playa.

Fue graciosos el incidente de la puerta, hasta subió el conserje.

También visite Montañita, hermoso lugar. Al parecer es muy atractivo turísticamente. Somos más los extranjeros que los ecuatorianos en el lugar.

Las artesanías se ven por doquier. Y muchas mujeres se pasean, vestidas artesanalmente, o solo con pantalones y bikinis.

El sonido del reggae salía de los muros. Por un momento pretendí quedarme. Las hostales, los restaurantes, los locales, todo estaba finamente diseñado con materiales silvestres.

Aunque quedamos con las ganas de tomar mohito. A esa hora las barras no atendían. Pero me prometieron otro en un futuro muy cercano.


Que más decir me está fascinando el lugar. Ha cambiado mucho desde la última vez que lo visité.

Pero comienzo a extrañar a la gente que nunca he visto, siento que esas personas serán necesarias en un lapso de tiempo que se viene muy rápido.

Estoy fuera, pero aun no tiene sentido

Estoy harto de tratar de escribir lo mismo.

Convecido ya que logramos escapar de la manera mas segura.

En el pasado quedaron las marcas dolorosas de querer acabar con todo. Mi cuerpo es fuerte y se ha encargado de poco a poco ir borrandolas.

Quiero comnezar a extrañar. Se que ya lo hacen mis amigos y familia. Pero confiezo que me gustaría confirmar que ella me extrañe.

Ella no me ha visto pero siente cosas por mi, quizas no exista. Se arrepiente de no poder haberme dicho que me quedara, porque ella me ama.

Ella tiene miedo de pensar que yo actuaré con indeferencia, teme desepcionarse.

Extraña mis tontas costumbres y mi forma de ser. Solo lo sabe virtualmente.

Yo también la extraño, lo que significa que es mutuo. El echo de que sepa que ella me extraña, y que intuya todo lo que siente por mi, habla bien de mis sentimientos.

Pero ella cree que solo aparento ser..

Pero es mentira se lo que siente, porque yo también lo siento.

Ella y también yo, no logramos soportar todo el tiempo que queda para unirnos.. Siempre nos separa algo. Pero el tiempo nos distancia y lo lazos se hacen más fuertes.

Temo perderla ya, sin siquiera tenerla a mi lado.

No te decepciones de él, es un buen tipo.

Él, que me obliga a escribir, uff, creo que siento lástima por él.

Él piensa que está en un estado depresivo. Pero no lo está.

Él quiere que sepas que al igual que a ti, también será una eternidad estos casi dos meses.

Guillermo y ella formarían una bonita pareja, pero no se han dado las cosas, quizas haga falta un poco de ayuda.

Se encuentran muy distantes, y ni siquiera se si relamente Guillermo este en lo correcto al pensar que ella siente algo por él.

Se despide atentamente, el culpable de todos estos escritos, el ser bipolar que vive en un cuerpo facil de dominar. Lo lamento Guillermo.

Otro Cadáver En Mi Camino

Ya es lunes y como de costumbre estaba con el tiempo en contra, y la canción de Guns N’ Roses logró despertarme, pero en segunda instancia.

En fin, ya iba tarde y no me hacía problemas por aquello. Al salir para comenzar con el primer día de la rutina de la semana, te vi. Pero ya no eras el mismo, nunca pude conocerte mejor.

Vivías bajo mi techo, pero te mantenías alejado, yo te alimenté y siempre hubo de tu parte una señal de respeto pero de forma indiferente.

No sentí pena por ti. Tu cuerpo casi fresco delataba que tu muerte había ocurrido hace pocos momentos.
Aunque no tuviéramos lazos, siempre existirá en mi un sentimiento de compañerismo; no importa que no te conociera, solo me preocupé de impedir que, aunque muerto ya, siguieran humillándote los vehículos.

Me detuve a esperar el transporte que me llevaría nuevamente a la rutina que pronto acabará. Y tomé conciencia de lo peligrosa que resulta ser la jungla de cemento. Sentía pasar los vehículos más veloces que de costumbre. Tomé la precaución de mantener un poco la distancia del rapidísimo trafico, pero solo por hoy, porque de costumbre no lo hago.

En el camino a la rutina, pensé todo lo que podría escribir ahora, mientras reventaba en mis tímpanos canciones de Radiohead que nunca antes había escuchado, pero sin embargo eran perfectas para la situación.
Y me quedé dormido como de costumbre también, y te olvidé. Porque nada nos vinculaba y tampoco hicimos el intento de establecer lazos.

Ahora solo se que mi vida sigue después de este pequeñísimo alto, y que tú permanecerás en el lugar donde te dejé, hasta que alguien quite tu fallecido cuerpo, porque no me siento con la obligación de hacerlo.

Y al diablo con lo que dicen, eso de hoy por ti, mañana por mi. Porque en este caso si yo estuviera en tu lugar, muerto en medio de la calle, tu no serías capaz de ayudarme, porque no eras humano.





No todo es color de rosa, pero si evitamos lo malo, ¿sería acaso más agradable el momento que vivimos?
Guillermo.