Fue una noche del 15 de agosto, tenías frío
tu dijiste "te demoraste". De verdad fue
todo de extraña forma ideal, no había
nada planeado, pero ambos sabíamos
y queríamos que sucediera.
Día a día nos fuimos enamorando
y en un lapso no muy prolongado
del alma se me escapó un te amo.
Tu impresión dejó en evidencia
un placer único, que a tu corazón
palpitó al ver de mis labios
salir tan sinceras palabras.
Tu corazón cubierto de amor
tampoco se dejó esperar, y respondió
con otro sincero te amo.
No basta obligar a nuestras mentes
imaginar un futuro.
Porque con propia iniciativa nuestros
sentimientos proyectan una vida juntos.
Acariciar nuestras panzas, besar nuestros cuellos
cerrar los ojos y apoyar nuestras
cabezas, juntando sensualmente
nuestras narices en señal de confianza.
Hemos sido uno, en distintos
horarios y movimientos.
En algunos llantos en miles de sonrisas,
en discusiones vagas que no pasan al espanto.
De principio no es un hasta siempre
delirios me hacen pensar en la eternidad
aveces me disgustan esas
ideas que vienen y que van
Paso a paso, rápido, rápido, lento.
Suena este vals que conduce el viento
Lo que nos otorgue el tiempo
vivamos todos los momentos
gastemos hasta el último aliento
daré por ti todo lo que siento.
En la arboleda y a lo largo del camino
desde el día que se unen los destinos
esos que me guiaron hacia la costa
a pasear de la mano, casi como langosta.
Con la libertad de un colibrí cierto
revoloteando en las flores del huerto
parte de mi corazón eres mi vida
pues te digo te amo más que todo este puerto.
GuillE
